domingo, 30 de septiembre de 2012

Comienzo


Cama desecha. Estantería tirada en el suelo. Botes de perfumes rotos, cuyos cristales acompañan a las páginas arrancadas y las hojas rotas en el suelo, dándole un aspecto tétrico a la habitación. El oscuro escritorio de negro lacado ocupa parte del suelo. Dos sillas tiradas con rabia. Una botella de tequila a medio acabar en su mano, mientras la otra mitad se encuentra ambientando la habitación. Y un mechero. Ella en el pasillo, con la puerta abierta. Un vacío en su interior. Un nudo en el estomago y una sensación de opresión en el pecho que hace que de vez en cuando boquee en busca de aire. Lo enciende y prende fuego lentamente a unos papeles que tiene en la mano. Los tira en la habitación y se queda apoyada en la pared. Observando con gesto irreflexivo como todo se va quemando y como una hoguera improvisada por la rabia, el agotamiento y la renuncia se va alzando ante sus ojos. Siente una emoción irracional al ver ese fuego alzarse y desprender todo ese calor. Un calor que la hace sentir viva. Que la quema. Por dentro. Un trago al tequila y suspira. Solo ella sabe lo que hay en su interior y la mezcla de emociones que se agolpan en su garganta provocando que un grito desgarrador saliese por ella. Cierra los ojos notando el palpitante fuego acercarse a ella y como el humo inunda sus fosas nasales. “Tengo que salir de aquí. Ya.” Piensa pero en vez de moverse da otro trago. Uno más. Abre los ojos. Otro trago más. Y tira la botella al cuarto, escuchando como la botella acaricia el suelo y se rompe en pequeños fragmentos. Escucha como el fuego ruge con el encuentro del alcohol. Ella vuelve a sonreír, esta vez más enigmática que antes. Se da la vuelta y se va. Sale de la finca sin mirar atrás y sin pensar en las consecuencias de su acto.  

4 comentarios:

  1. Tú, tus enigmas y tu perfecta escritura. Me encanta como escribes, es simplemente... Mmm. No sé qué palabra usar. Simplemente te hace sentirlo. Cada línea, cada palabra. Cada letra incluso. Una llega a sentir la misma opresión en el pecho que el personaje, ese agobio, agotamiento, la renuncia... Y ese acto irracional que al fin de al cabo no es tan irracional, simplemente... ¿Impulsivo? En fin, sabes que me encanta cómo escribes. Es apasionante.

    Espero verte por mi blog :)

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  2. Me encanta tu forma de escribir. Creo que tienes mucho talento.

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Estaré encantada de leer todo lo que quieras decirme, siempre y cuando sea desde el respeto :)